Añade el sabor robusto y aromático de la cebolla a tus platillos sin las lágrimas ni la preparación. Nuestra cebolla deshidratada es un ingrediente versátil que conserva todo su sabor y aroma, listo para usar cuando lo necesites. Sin azúcares añadidos ni conservantes, es la forma más práctica de tener un ingrediente esencial siempre a mano.
Perfecta para sopas, guisos, salsas, marinadas o para espolvorear sobre carnes y vegetales. Se rehidrata fácilmente y se integra perfectamente a tus recetas, aportando un sabor profundo y natural.
Para sopas y guisos: Agrega la cantidad deseada de cebolla deshidratada directamente a tus preparaciones. Se rehidratará con el calor y liberará todo su aroma.
Como sazonador: Muele la cebolla deshidratada para obtener un polvo y espolvoréalo sobre huevos, ensaladas o carne antes de cocinar.
Para rehidratar: Si necesitas cebolla picada, remoja una cucharada en agua tibia por 10-15 minutos. Luego, cuela y úsala en tus recetas.
Calorías: Aproximadamente 90 kcal
Carbohidratos totales: 21 g
Fibra dietética: 4 g
Azúcares: 9 g (Naturalmente presentes en la verdura)
Vitamina C: 5% de la ingesta diaria recomendada (aprox.)
Calcio: 5% de la ingesta diaria recomendada (aprox.)
Sabor Concentrado: Aporta un sabor intenso y profundo a tus platillos.
Conveniencia: Elimina el trabajo de pelar y picar, ahorrando tiempo en la cocina.
Larga Duración: Al estar deshidratada, tiene una vida útil prolongada y se mantiene fresca en tu despensa.
¡Simplifica tu cocina sin sacrificar el sabor con nuestra cebolla deshidratada!